Historia de la revolución Rusa
Autor: Leon Trotski
Editorial: Txalaparta
ISBN: 9788417065232
Reseña
Como señala Isaac Deutscher, biógrafo de Trotsky, “esta es la obra cumbre de Trotsky, por su escala y por su potencia, pero también como la más completa expresión de sus ideas sobre la revolución”.
En dos extensos volúmenes, agrupados ahora uno, el autor narra, describe y reflexiona de manera lúcida acerca de los acontecimientos sociales, políticos e ideológicos y su devenir revolucionario; agregando al rigor histórico con que aborda este cometido, cuyo propósito explícito es exponer “con claridad el porqué los hechos sucedieron de ese modo y no de otro”, la manera magistralmente vívida de la narración, que logra transportarnos a la Rusia de principios del siglo XX y adentrarnos en las honduras de sus convulsionadas, vertiginosas y apasionantes jornadas, haciendo de su lectura no sólo una experiencia política significativa, sino también una experiencia literaria que únicamente un clásico como este puede provocarnos.
León Trotsky. Bereslavka (Ucrania), 1879 Coyoacán (México), 1940. Nació en una familia judía de labradores propietarios y estudió Derecho en la Universidad de Odessa. Participó desde joven en la oposición clandestina contra el régimen autocrático de los zares. Fue detenido varias veces y desterrado a Siberia, pero consiguió huir y se unió en Londres al que ya aparecía como jefe de la oposición socialdemócrata en el exilio: Lenin. Tras recorrer medio mundo, se trasladó a Rusia en cuanto estalló la revolución de febrero de 1917, que derrocó a Nicolás II. Puso su talento de organizador y agitador al servicio del Partido Bolchevique y fue elegido presidente del Sóviet de Petrogrado. Desempeñó un papel central en la conquista del poder por Lenin. Como primer comisario de Asuntos Exteriores de la Rusia bolchevique (1917-1918), negoció con los alemanes la Paz de Brest-Litovsk. Luego fue comisario de Guerra (1918- 1925), cargo desde el cual organizó el Ejército Rojo en condiciones muy difíciles. Su labor fue, por tanto, crucial para la supervivencia del primer Estado comunista del mundo. Lenin le señaló como su sucesor antes de morir en 1924, pero Stalin, que contaba con fuertes apoyos en el aparato del partido, le impidió acceder al poder, lo expulsó del partido, lo deportó a Kazajistán y lo desterró del país. Trotski no cejó en su lucha revolucionaria, escribiendo desde el exilio en defensa de sus ideas. Stalin ordenó su asesinato a un agente soviético.