Andréi Rubliov
Autor: Andréi Tarkovski
Editorial: Ediciones Sígueme
Materia: Narrativa
ISBN: 84-301-1596-9
Formato: Rústica, 13,5 x 21 cm.
Páginas: 256
Reseña
Guión literario en catorce actos
El 5 de septiembre de 1970, el cineasta Andréi Tarkovski escribía en su Diario: «Religión, filosofía, arte –los tres pilares sobre los que descansa el mundo– fueron inventados por el hombre para condensar simbólicamente la idea de infinito». Este pensamiento ofrece, sin duda, una de las claves para comprender la genial película Andréi Rubliov.
A lo largo de muchos fotogramas, el rostro y las peripecias vitales de este famoso pintor de iconos revelan su permanente nostalgia de infinito y su dramática lucha por recuperar la serenidad espiritual en aquel convulso siglo XV.
El guion literario que el lector tiene entre sus manos es, en el fondo, un manifiesto a favor de la esperanza que el arte, la búsqueda de la verdad y el sentimiento religioso portan consigo para vivir, e incluso morir, con dignidad.
Andréi Tarkovski nació en Zavraje (Rusia) en 1932. Hijo de un conocido poeta, desde niño recibe una esmerada educación, que le hará interesarse por la pintura, la música y la literatura, aunque finalmente estudiará en el Instituto Pansoviético de Cinematografía de Moscú, donde en 1960 presenta como proyecto de fin de carrera el cortometraje La apisonadora y el violín.
Un año después, alcanzará renombre internacional cuando reciba el León de Oro del Festival de Venecia con su película La infancia de Iván. Desde ese momento no le abandonará ni la polémica en su país ni el éxito fuera de él. Obras como Andréi Rubliov (1966), Solaris (1972), Stalker (1979) o Sacrificio (1986) constituyen los grandes hitos de su breve filmografía.
Andréi Tarkovski murió en París en 1986. Al finalizar su funeral, celebrado en la Iglesia Ortodoxa de la calle Daru, el violonchelista Mstislav Rostropóvich interpretó una suite de Bach como sentido adiós.